El Mundo
Después del intento fallido del pasado mes de noviembre, la cumbre está a punto de comenzar con el aparente mismo desacuerdo que existía entonces. Los 'Veintisiete' llegan a Bruselas divididos en dos grandes bloques: los llamados 'amigos de la cohesión', entre los que se encuentra España y que piden un presupuesto europeo generoso para poder compensar los recortes en las cuentas nacionales; y, por otro lado, los 'amigos de un gasto mejor', que básicamente son las grandes economías del Norte de Europa que exigen más recortes a la actual propuesta.
La base de la negociación, de momento, es el mismo documento que presentó el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, en la última cumbre. En él se mantenía el recorte de 80.000 millones de euros respecto al texto inicial de la Comisión Europea y fijaba, en total, un techo de gasto de un billón de euros millones de euros para los próximos siete años.
En las últimas semanas el equipo de Van Rompuy ha estado afinando este documento después de mantener reuniones bilaterales con todos los países. Todo apunta a que habrá algún recorte adicional para contentar a quienes exigen más ahorro, aunque el nuevo tijeretazo no tiene por qué ser excesivo.
La clave
La llave para desbloquear el acuerdo puede estar, una vez más, en los funcionarios europeos, que se presentan como moneda de cambio para que Reino Unido y Alemania, entre otros, no bloqueen un acuerdo que requiere unanimidad.
Las condiciones laborales de los eurócratas se ha convertido en la parte más visible de estas negociaciones y, posiblemente, también la más demagógica. El primer ministro británico, David Cameron, abandonó la última cumbre sobre los presupuestos lanzando duras críticas contra los funcionarios europeos, a quienes ha declarado como su enemigo público número uno. En su rueda de prensa criticó el hecho de que 200 eurócratas cobren más que él, es decir, superan una nómina anual de 180.000 euros.
También en Alemania están centrando gran parte del debate sobre los presupuestos europeos en el epígrafe de la Administración europea, a pesar de que sólo representa el 6% de todo el gasto comunitario. Según explica una fuente diplomática, "no se trata de que vaya a lograrse un ahorro significativo en esta partida" -al fin y al cabo son 'sólo' 62.629 millones de euros presupuestados para un total de un billón de euros en los próximos siete años- "sino de que haya un gesto simbólico que demuestre que la austeridad también afecta a los funcionarios".
Y lo cierto es que en la última propuesta de Van Rompuy todas las partidas sufrían un recorte significativo respecto al planteamiento inicial de la Comisión menos en el epígrafe de Administración, donde se incluyen no sólo los sueldos y las pensiones de los funcionarios, sino también otros gastos del funcionamiento diario de las instituciones: alquiler de edificios, servicios de traducción, publicaciones, seguridad, etcétera.
Escaso recorte
Para hacerse una idea, en su último texto el Consejo Europeo ha propuesto un recorte del 15% en inversión para el crecimiento y del casi el 6% para fondos de cohesión. También hay una rebaja del 4,5% en fondos agrícolas y, sin embargo, en el capítulo de administración el recorte es de sólo un 0,8%.
¿Van a aceptar esto Cameron, Merkel y compañía? Obviamente no. Debates aparte de si tienen muchas o pocas ventajas, los funcionarios europeos van a salir de esta cumbre peor de como van a entrar. El 'premier' británico ha dado unas pistas de por donde pueden ir los recortes, ya que en la última cumbre él reclamó aumentar la edad de jubilación de estos trabajadores hasta los 68 años, frente al umbral actual de 63 (aunque hay una propuesta sobre la mesa para que aumente a 65); reducir las nóminas en un 10% y recortar las pensiones desde el 70% del salario final actual hasta el 60%.
El debate ideólogico, por tanto, va a estar centrado sobre este colectivo que engloba a cerca de 55.000 trabajadores y que, dicho sea de paso, ya han afrontado fuertes recortes significativos de sus condiciones laborales.
Noticia aún sin comentar.
Para poder opinar es necesario el registro. Si ya es usuario registrado, escriba su email y contraseña:
Si desea registrase en la Administración al Día y poder escribir un comentario, puede hacerlo a través el siguiente enlace: Registrarme en La Administración al Día.