Levante-emv.com – S. Gómez – 23.07.20
La recuperación total de la actividad presencial en la administración autonómica hace un mes abrió una brecha entre el departamento competente en función pública, responsable de la orden y en manos del PSPV, y las conselleries de Compromís (principalmente Economía), algunas de las cuales promueven planes específicos de teletrabajo. Aunque Justicia prometió impulsar una nueva regulación en este campo, el Ivace ha decidido adelantarse, argumentando que dicha norma <<se demorará en el tiempo>> y, mientras tanto, <<no es posible prescindir del teletrabajo hasta que finalice la crisis sanitaria>>, según queda plasmado en su proyecto.
Como organismo autónomo, en cualquier caso, los trabajadores del ente no son funcionarios y, por lo tanto, no dependen de Función Pública, reacia al teletrabajo masivo. El programa piloto fue suscrito el miércoles por la directora del Ivace y los delegados de Prevención de CC OO Y UGT antes de ser trasladado a la Conselleria de Hacienda. En Economía subrayan que el proceso ya está en marcha.
La propuesta incide en que el teletrabajo <<se ha demostrado altamente efectivo para prevenir los contagios y la aparición de nuevos brotes epidemiológicos>> en sus centros de trabajo durante el estado de alarma, antes de hacer hincapié en que dichos focos sí se han producido <<con el posterior retorno masivo a la modalidad presencial>> en la Ciutat Administrativa. Si una parte de la plantilla despliega el trabajo no presencial, alega el organismo, disminuirían las personas que habría que poner en cuarentena y en situación de incapacidad temporal ante un eventual contagio en sus dependencias.
El plan sostiene que el confinamiento del personal del IVACE no supuso ninguna pérdida de operatividad y la actividad del organismo se desarrolló <<de forma más que satisfactoria>> y eficiente. El ente remarca que la amenaza sanitaria <<no ha desaparecido>>.
El proyecto regula el teletrabajo con carácter voluntario para todos aquellos puestos de trabajo que no requieran presencialidad obligatoria y, especialmente, para quienes ya teletrabajaron con anterioridad y para el personal vulnerable o con menores a cargo. Con carácter general, la jornada de trabajo será la habitual y se exigiría un mínimo de dos días de trabajo presencial si no empeora la situación. Los responsables de cada área del Ivace determinarán los turnos y rotaciones correspondientes.
Inspecciones de salud
El plan contempla acciones formativas para brindar el conocimiento electrónico adecuado al personal, que podrá solicitar que el Servicio de Prevención de Riesgos Laborales inspeccione sus domicilios con tal de comprobar que las condiciones son las adecuadas para garantizar su salud. Igualmente, el Ivace promete medidas para <<prevenir el aislamiento>> de los empleados, brindando canales de información fluida. También se dotará de un <<protocolo de desconexión digital>>, para asegurar el descanso de la plantilla y su derecho a no responder mensajes a ciertas horas.
Cuando se ordenó la reincorporación presencial de todo el personal de la Generalitat, CSIF advirtió de que en el Ivace trabajaban 106 personas en un sótano <<sin condiciones adecuadas>>. El plan de teletrabajo desafía ese decreto.
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